Hice dos años en un colegio de mi barrio Sinaí,
llamado el Ángel de la Guarda, allí los niños (hombres) me quitaban las onces y
me pegaban, quizás porque yo era gordita, debido a esto mis padres me sacaron
de este colegio.
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| AL FRENTE DEL COLEGIO ANGEL DE LA GUARDA Y LA BANDA MARCIAL |
Luego pasé al Colegio Santa Luisa de Marillac,
femenino de Jesuítas, allí termine mis estudios secundarios. Fui excelente estudiante, pero allí nunca
becaban a nadie, era muy costoso, y mis padres a veces no tenían para pagar la
pensión.
En bachillerato, mi grupo de amigas éramos las
más grandotas del colegio, éramos 9 chicas, muy “recocheras” y chistosas todas,
nos llamaban las “botero” jejejejej.
Nunca perdí ningún año, por eso me gradué de 15
años.
Me gustaba que el colegio fuera exigente, de
allí mi buena ortografía y dedicación al estudio. Pertenecí a la banda marcial y al grupo de
danzas del colegio, de hecho siempre he sido excelente bailarina.
De allí nació mi vocación social, nos llevaban
a “escuelitas pobres” a casas de drogadicción, ancianatos y llevábamos donaciones
y comida.
Excelente educación la de este colegio…
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