Techo
inicialmente pertenecía al cacique Techitina y a la comunidad indígena quienes
posteriormente fueron despojados de la tierra. El terreno pasó entonces a manos del
encomendero Juan Ruíz de Orejuela y luego, en 1608, a los jesuitas.
Aunque
hay claridad sobre el momento en que las tierras fueron tomadas por
particulares, lo cierto es que años después apareció como propietaria doña
María Arias de Ugarte, quien al morir heredó la finca a las monjas de Santa
Clara.
La
finca fue posteriormente dividida en dos partes; la parte sur conservó el
nombre de Rosario, debido a que fue adquirida por el Colegio Mayor de Nuestra
Señora del Rosario en 1652.
En
1726, Techo fue vendido al capitán Juan de Ortega, quién la traspasó al jesuita
Francisco Castaño, rector del Colegio Mayor y Seminario de San Bartolomé hacia
1729.
En
1736 el padre José de Rojas adquirió para este colegio la parte de Rosario, y
así unificó nuevamente la finca inicial.
En 1767, los jesuitas fueron expulsados y se embargó la propiedad, la
cual fue dividida nuevamente.
Una
parte fue a parar a manos del virreinato y la otra, llamada Rosario, a José A
Doncel. Quien le cambió el nombre por el Tintal.
El
Tintal cambió de sus dueños reiteradamente hasta 1823, cuando fue adquirida por
José Antonio Sánchez, quién la dividió entre sus hijos Gabriel y Pío. La parte del nordeste conservó el nombre del
Tintal y al sureste lo llamaron Tintalito.
Esta última fue fraccionada posteriormente, adquiriendo como nuevo
nombre El Juncal, y luego haciendo los Pantanos. Por su parte, Techo, que en 1861 había pasado
a manos del gobierno con la desamortización de los bienes eclesiásticos, fue
vendida a Avianca y al consorcio de cervecerías Bavaria.
La
Chamicera, otra hacienda que también hace parte del actual Kennedy colindaba
hasta principios del siglo pasado con Techo y Tintal y llega hasta Puente
Aranda.
En
ese entonces pertenecía a Manuel Montes y a Jorge Lozano de peroita, quienes
posteriormente la perdieron en pleito.
En
1774 la hacienda fue a parar a manos de Miguel de Ribas y su hermano quienes
ampliaron con parte de la Estanzuela y parte de Techo y la extendieron hasta el
río Fucha. La hacienda pasó a manos de
Eusebio Umaña durante la época de la pacificación española reconquista. A la muerte de Umaña sus dos hijos dividieron
la hacienda en dos partes, una de ellas continúa con el nombre de la Chamicera
y se divide en: Santa Inés, Santa Helena y El Porvenir, la otra parte se tomó
el nombre de San Isidro e igualmente fue fraccionada. En estas haciendas se desarrolló
posteriormente lo que se conoce como CIUDAD KENNEDY.
Tomado
de: página Web de la Alcaldía local de Kennedy
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